Alexandria21 Cambiando al mundo, una acción a la vez...

• Nací en la Ciudad de México el último domingo de marzo de 1950.
• Recuerdo que aprendí a leer a los 4 años. Mis papás me inscribieron al Jardín de Niños a los 5 años y comencé la Primaria a los 6. Soy el mayor de ocho hermanos.
• Al cumplir 9 años surgieron mis primeras reflexiones y cuestionamientos de tipo filosófico y científico.
• A los 11 años tuve mis primeras experiencias en docencia al dar los temas de física a mis compañeros de clase y descubrí mi fascinación por la enseñanza y por la física.
• Aprendí fotografía en blanco y negro a los 15 años.
• A los 16 años aprendí electrónica basada en tubos al vacío (bulbos) de manera autodidacta.
• Mi segunda experiencia en docencia ocurrió cuando mi maestro de física de 1º de bachillerato me invitó a dar la clase de laboratorio a mi grupo. Él escuchaba y veía los experimentos y los enseñaba al otro grupo a la siguiente hora.
• Aprendí diseño electrónico con transistores en 1967.
• Terminé el bachillerato a los 17 y comencé la licenciatura en Física en 1968 en la Facultad de Ciencias de la UNAM. Para entonces, ya estaba aprendiendo diseño electrónico con circuitos integrados (chips) y tenía un laboratorio propio en casa en el que había construido una cámara de niebla para estudiar radiactividad y un equipo de rayo láser de Helio-Neón.
• En 1969, con un grupo de amigos habíamos aprendido a diseñar, construir y lanzar cohetes con combustible de estado sólido.
• Comencé mi actividad docente en la UNAM y el instituciones del sistema incorporado en 1972.
• Comencé mi actividad académica en diseño y desarrollo de instrumentos científicos y didácticos a los 22 años.
• Estudié una Maestría en Ciencias (Física) de 1974 a 1976.
• Aprendí diseño de sistemas basados en microprocesadores y programación en lenguaje de máquina, lenguaje ensamblador y lenguajes computacionales de alto nivel de 1974 a 1985.
• Me uní en matrimonio a una mujer maravillosa y juntos hemos hecho nuestra vida cada día desde 1977 y acompañados de tres hijas extraordinarias.
• Tomé cursos de especialización en dirección técnica de proyectos de alta tecnología y en desarrollo tecnológico de 1980 a 1984.
• Estuve al frente de la jefatura del departamento de Diseño y Desarrollo del Centro de Instrumentos de la UNAM de 1981 a 1985.
• Fuí asesor del Instituto Latinoamericano de Comunicación Educativa (ILCE) de 1988 a 1992. 
• Con un grupo de alumnas del último año de bachillerato, concebí la idea de Alexandria21, en 1989.
• Fui asesor de la Secretaría de Educación Pública (SEP) de 1993 a 1999.
• Estudié una maestría en Educación con especialidad en cognición de los procesos de enseñanza–aprendizaje y un doctorado en Educación de 2001 a 2008.
• Publiqué 12 artículos de investigación educativa en congresos nacionales e internacionales de 2002 a 2009.
• Fundé Alexandria21 en 2002.
• Fui secretario académico de la Maestría en Docencia para la Educación Media Superior (MADEMS) de la UNAM de 2004 a 2006.
• Me preparé como coach certificado internacionalmente con especialidad en ontología del lenguaje en 2016.

• El haber tenido experiencias de auto–aprendizaje desde los 4 años de edad.
• El haberme enfrentado a preguntas filosóficas y científicas desde los 9 años.
• El haber vivido la acción docente en 6º de primaria y así descubrir mi fascinación por la enseñanza y por la física.
• El hecho de haber vivido una segunda experiencia docente a los 15 años.
• El haber tenido un laboratorio propio de fotografía y electrónica, en la casa de mis padres, de los 17 a los 26 años, que me permitió valorar el auto–aprendizaje.
• Los conocimientos de extraordinarios maestros de la Facultad de Ciencias de la UNAM y haber vivido como estudiante universitario el movimiento estudiantil de 1968.
• El haber comenzado mi actividad docente en la UNAM y en instituciones del sistema incorporado en 1972 y haber convivido con estudiantes a través del intercambio de experiencias más allá de los procesos de enseñanza–aprendizaje.
• El haber iniciado mi actividad académica en diseño y desarrollo de instrumentos científicos y didácticos a los 22 años, con el acompañamiento y las enseñanzas de grandes investigadores de las áreas científicas y tecnológicas.
• El haber formado mi propia familia a partir de los 27 años.
• El haber realizado estudios de posgrado y de alta especialización y haber sido alumno de extraordinarios profesores.
• El haber impulsado el uso de computadoras en la educación, desde 1985.
• El haber concebido la idea de Alexandria21 con un grupo de alumnas del último año de bachillerato, en 1989.
• El haber desarrollado e implementado tecnología educativa, desde 1990.
• El haber publicado artículos de investigación educativa en congresos nacionales e internacionales.
• Haber sido profesor de Secundaria, Bachillerato, Licenciatura y Posgrado durante 40 años.
• Estar haciendo investigación y aportaciones propias en el campo de la educación, en cuatro áreas: ontología, teleología, epistemología y metodología.

Con el propósito de explorar los principios de funcionamiento del LASER, en 1970 construí el primero de varios equipos láser de He-Ne. Compré por correspondencia el tubo de descarga con la mezcla de gases y los espejos multicapa para lograr el efecto láser en los E.E. U.U. y un amigo de la familia lo transportó desde Nuevo Laredo en el refrigerador del carro comedor del ferrocarril hasta la Ciudad de México. La experiencia adquirida me permitió proponer en la UNAM la fabricación de este tipo de equipos para la enseñanza de la óptica.

Con el objetivo de contar con un equipo portátil y ligero para aplicaciones médicas, en 1972 el Centro de Instrumentos y el Instituto de Investigaciones Biomédicas de la UNAM, con la colaboración del Instituto de Física y la Facultad de Ciencias, desarrollaron un pequeño laboratorio que estaba constituido por un microscopio y un biocolorímetro, y sería conocido como SISPLAC (Sistema Portátil de Laboratorio Clínico) y participaron en este proyecto: los doctores Luis Cañedo Dorantes y Alberto Jorge Limón Lason, el ingeniero Héctor del Castillo González y el físico Francisco Javier Sierra Vázquez.

La tesis de licenciatura en física de Francisco Javier Sierra Vázquez: «Aplicación de la teoría de control en la estabilización de campos magnéticos» fue desarrollada en el Instituto de Física de la UNAM y terminada en 1974. El proyecto consistió en el diseño, desarrollo y construcción de un sistema electrónico para medir y controlar la intensidad del campo magnético en un espectrómetro de masas utilizado para analizar la composición isotópica de muestras de uranio (a la izquierda). Los instrumentos de medición y control se observan en el gabinete de instrumentos de la derecha. Se utilizó tecnología híbrida basada en circuitos integrados, transistores y una válvula al vacío (bulbo) de alta potencia. Se conectó, mediante interfaces digitales, una calculadora electrónica programable para el procesamiento de los datos y un teletipo para la impresión de resultados.

En 1974, la UNAM, a través del Instituto de Astronomía y el Centro de Instrumentos, se aventuró a diseñar, construir, instalar y poner en operación un telescopio con un espejo principal de 2.12 m de diámetro, para el Observatorio Astronómico Nacional ubicado en la Sierra de San Pedro Mártir, en la Península de Baja California. El proyecto se terminó en 1979, gracias a la integración de un equipo de trabajo cuyos líderes tuvieron una extraordinaria capacidad no solo científica y tecnológica, sino también la visión y el don para coordinar el trabajo de todos. En los primeros meses, se tomó la decisión de desarrollar los sistemas de control con tecnología digital, construida con electrónica discreta porque los microprocesadores eran una tecnología demasiado nueva y su desarrollo futuro era aún incierto. Este telescopio fue el primero en su tipo a nivel mundial y ahora ya cuenta con una consola basada en microprocesadores. En este proyecto participaron: Dr. Arcadio Poveda, Ing. Héctor del castillo, Ing. Amado Santiago, Fís. Élfego Ruíz, Dr. Joseph Warman, Fís. Jaime Pimentel, Fís. José Luis Pérez Silva, Ing. José de la Herrán y Fís. Francisco Javier Sierra Vázquez.
Mi mayor responsabilidad estuvo centrada en la planificación general del proyecto mediante la técnica PERT, las simulaciones por computadora y en modelos a escala del comportamiento dinámico de la estructura mecánica, los sistemas de suministro de energía eléctrica ininterrumpida y los sistemas de seguridad.

En la etapa inicial de la Red de Teleproceso de la UNAM, las terminales de datos se conectaban a la computadora del centro de cómputo mediante el uso de una línea telefónica para cada terminal. Mediante un proyecto conjunto, el Centro de Servicios de Cómputo y el Centro de Instrumentos de la UNAM participaron los M. en C. Ángel Kuri, Manuel Estévez y Francisco Javier Sierra Vázquez en el diseño de un concentrador inteligente, en 1979. Cada concentrador permitía conectar hasta seis terminales mediante una línea telefónica. El Centro de Instrumentos fabricó 23 concentradores en 1980 y se resolvió el problema de saturación de la red de la UNAM.

En 1990, el programa COEEBA-SEP (COmputación Electrónica para la Educación BÁsica de la Secretaría de Educación Pública) había estado distribuyendo computadoras Micro-SEP a las escuelas públicas desde 1986, a través del ILCE (Instituto Latinoamericano de Comunicación Educativa). Estas computadoras entregaban una señal analógica de video de acuerdo con la norma NTSC para televisión. Sin embargo, el fabricante en EE. UU. cambió el diseño y entregó computadoras con señal digital CGA, que fue un estándar de 16 colores introducido para computadoras compatibles con IBM-PC. En este proyecto se usaban televisores de 25 pulgadas y se presentó el problema de la incompatibilidad de señales. El ILCE me solicitó el diseño y la fabricación de un convertidor de señal para resolver este problema. Se fabricaron 2800 piezas que fueron entregadas para poder iniciar el ciclo escolar 1990-1991. En 1991, desarrollé otro convertidor (ver. 2.0), ahora para señales VGA con capacidad de 256 colores.

En 1997, Arancia–CPC estaba fabricando jarabe de maíz y para estandarizar la calidad de su producto y cumplir con los requerimientos de sus clientes, nos solicitaron a Francisco Javier Sierra Vázquez y Luis Enrique Moreno, el diseño, desarrollo y puesta en operación de un sistema de control automático para la temperatura de cocción del maíz. Desarrollamos un sistema basado en microcontroladores y programable desde una computadora personal.

Los primeros accesos a Internet en México se instalaron en la UNAM y el ITESM. Por este motivo, no debe sorprender que los primeros desarrollos de conectividad en Internet fueran en instituciones educativas. En 1999 realicé la conexión a Internet con un enlace dedicado a la UNAM de 64 kilobits por segundo y una red local para el Colegio Francés del Pedregal. Ahí instalé en 2002, un enlace de fibra óptica para alcanzar las secciones más lejanas del campus. En 2003, instalé el primer servidor X–server G4 y en 2006, un servidor G5. Ese año se hizo el cambio de conexión, ahora con un enlace dedicado de MetroRed de 256 kilobits por segundo a través de TelMex. En 2011 se hizo otro cambio para aumentar el ancho de banda, ahora a 2 megabits por segundo, mediente un enlace de microondas.
Por otra parte, en la UNAM instalé dos servidores para dar alojamiento a las aulas virtuales de la Maestría de Docencia para la Educación Media Superior (MADEMS) en 2006.
En 2007 instalé un servidor para la Sociedad Mexicana para la Divulgación de la Ciencia y la Técnica (SOMEDICyT).
En 2011 también instalé el servicio y la red local para el edificio de secundaria y bachillerato del Instituto Piaget.